La Universidad de Burgos solía realizar sus investigaciones espectroelectroquímicas en sistemas separados: el equipo electroquímico estaba controlado por un software dedicado y el espectrómetro estaba controlado por otro software dedicado. Las dos señales separadas debían transferirse a una tercera computadora para extraer la información relevante del experimento. El Departamento de Química buscaba una solución más sencilla y eficiente para sus mediciones espectroelectroquímicas.

Entraron en estrecha colaboración con Metrohm DropSens, lo que condujo a la creación del primer instrumento integrado dedicado a la espectroelectroquímica del mercado. SPELEC incluye todo lo necesario para mediciones espectroelectroquímicas en un solo instrumento: potenciostato, espectrómetro y fuente de luz controlados por un único software dedicado.

Con la configuración anterior, los estudiantes de la Universidad de Burgos podían realizar alrededor de seis experimentos en una mañana. Con SPELEC pueden realizar hasta 100 durante un día.