La corrosión de los componentes metálicos es un problema inherente a los motores, ya que los metales tienden naturalmente a oxidarse en presencia de agua o ácidos. Un mayor contenido de ácido se refleja en un valor de pH bajo y podría provocar una serie de problemas, como una vida útil en almacenamiento (estabilidad) más corta o una menor capacidad de amortiguación del refrigerante o antioxidante del motor utilizado. Esto, a su vez, conduce a una reducción de la vida útil de los motores, por ejemplo. Sin los refrigerantes y agentes antioxidantes adecuados, los motores pueden sobrecalentarse y agarrotarse, lo que resulta en daños costosos y mantenimiento adicional, o incluso en la necesidad de un reemplazo completo de las piezas afectadas.

En esta Application Note, las muestras de refrigerantes o antioxidantes de motor se disuelven en agua, y la medida del pH con el Profitrode se realiza de acuerdo con la norma ASTM D1287.

Se demuestra la aplicación para etilenglicol anhidro, glicerol anhidro, refrigerante de motor y aceite antioxidante.

No se requiere preparación de muestras.