La producción de papel y pulpa es un proceso industrial bien establecido que se ha adaptado con el tiempo para satisfacer las necesidades actuales. La gestión de recursos se ha convertido en un elemento crucial en un mercado en constante cambio. La calidad y la alta producción son aquí las palabras clave para lograr un precio máximo para el producto final. La fuerte competencia obliga constantemente a optimizar las condiciones de producción. Por otra parte están los costes de los insumos y el precio de mercado de la cadena de valor añadido. La brecha entre la compra y la venta es el beneficio, que debe optimizarse para amortizar de forma rápida y eficaz las inversiones.